Biografía 1973-¿?
No voy a contar un rollo sobre mi vida por pudor y para no aburrir, además hay cosas que mejor que no se sepan. He intentado explicar mi vida relacionada con el arte.
Infancia
Nacido en la ciudad de Zaragoza pasé mi infancia en el barrio de Casablanca y en el monegrino pueblo de Leciñena, siempre cogiendo lo mejor y lo peor de cada sitio. Mi familia materna es de Leciñena y allí mi abuelo construyó un chalet donde pasamos momentos inolvidables. Fue en Leciñena donde hice mis primeros cuadros aunque realmente el primer cuadro que pinté con oleo fue en Madrid, en casa de mi tío.
Vengo de una familia de clase trabajadora, eso me ha marcado como artista, mis padres no tenían amigos influyentes para que me comprasen cuadros, ni mi apellido era famoso, como otros, para conseguir exponer en según que sitios, pero el pertenecer a la clase trabajadora es algo que llevo con orgullo.
La formación
Cuando alguien me pregunta que he estudidado suelo responder que nada, cuando me insisten digo que mucho pero no tengo papeles para demostrarlo. Cursé la Educación General Básica y después acabé haciendo una Formación profesional que poco o nada me interesaba, pero tuve la suerte de que con 16 años entré a trabajar en una imprenta donde aprendí mucho sobre las artes gráficas y me sirvió para tener dinero y dedicarlo a la pintura, bueno, y a otras cosas.
La adolescencia
No se cuando empieza y cuando acaba, lo que sí se es que fueron unos años muy buenos, tenía trabajo y pude alquilar un piso para dedicarme a pintar después de trabajar.
Entré en la Asociación de artistas plásticos Goya y conocí a gente muy interesante, empecé a salí mucho y por todos sitios, igual estaba viendo una exposición como estaba bebiendo cervezas en un bar rocker o en el maravilloso Bonanza, un bar de artistas. Exposiciones en la calle, en el Bonanza o en el Tango, conocer a críticos de arte y a artistas. Por supuesto también estuve metido en movimientos activistas que me sirvieron para tomar conciencia de la sociedad.
Los 90
En los 90 fue cuando monté con unos amigos el Colectivo Subterráneo y cuando empecé a realizar exposiciones más serias. Algunos fines de semana acudíamos a la plaza Santa Cruz a escandalizar con nuestras obras, otros artistas se acercaban a darnos consejos. Lo cierto es que era poco habitual que gente tan joven tuviese tan claro ser artista.
Pasaba mucho tiempo en el café Tango y me juntaba con gente mucho más mayor que yo, poetas, artistas, bohemios, etc. Un chaval menor de edad con aires de artista por los bares de Zaragoza y rodeado de lo mejorcico. En aquel tiempo artistas con cierto nombre me daban palmadas en la espalda y me animaban, pero con los años al ver que el niño crecía les dejó de hacer gracia.
En esta decada pintaba muchísimo porque me lo podía permitir, actualmente el material de bellas artes es muy caro y está dirigido a un público aburguesado que en lugar de comprar arte lo intenta hacer y además tienen la suerte de tener los contactos necesarios para vender su obra y exponer.
A principios de esta década el estado Español me vistió de verde y me militarizó bajo amenaza de cárcel, otros corrieron peor suerte que fueron a la cárcel y otros a trabajar gratis para el estado. Artísticamente flojeé bastante, cultura y ejército están reñidos, sí que recuerdo un gran cuadro que expuse que eran unas botas militares atadas a un candado gigante y se podía leer "artículo 30" el artículo de la Constitución que te obligaba a servir a la patria, es lo que tiene al vivir en una monarquía.
El año 2000
Este año decidí cambiar muchas cosas, llevaba 3 años viviendo con mi pareja, muchos años trabajando 12 horas al día y pintando por las noches sin dejar de salir. Demasiado estrés y pocas horas de sueño.
Una galerista que organizaba una feria internacional en Málaga me invitó a participar, el trato era sencillo, yo disponía de un stand entero para exponer y a cambio trabajaba en la organización de la feria junto con la dirección. Esta experiencia la repetimos en el año 2000 en Marbella, el problema es que en el trabajo no me podían dar fiesta, así que decidí dejar el trabajo, ya puestos decidimos mi compañera y yo legalizar el matrimonio y ya puestos decidí que tenía que montarme mi propio negocio.
Abandoné el trabajo y empecé a vivir de mi creatividad como diseñador gráfico, esto se tradujo en menos pasta y más libertad, el problema es que cuando no hay mucha pasta no es fácil montar exposiciones, por eso cuando un tipo con sueldo fijo me dice lo duro que es el arte, me dan ganas de …
En las afueras
En el año 2003 pensamos que sería bonito vivir en un pueblo, las casas son muy económicas y puedes disponer de un espacio más grande, así que nos liamos la manta a la cabeza y acabamos aquí.
En estos últimos años me he dedicado más a sobrevivir con el trabajo del diseño gráfico que a hacer exposiciones, en este territorio no quería ir de artista, además en esta zona son muy suyos, aquí si no eres nacido aquí, no eres nadie. Ni los supuestos técnicos de cultura de la zona se han interesado por mi obra ni profesionalmente me han encargado trabajo las "autoridades competentes".
En el 2012 ha sido cuando he decidido volver a las andadas, quiero volver a sentirme artista y llenar mi ego. Se acabó el descanso, me toca volver a moverme con mi dossier bajo el brazo y buscar sitios donde mostrar mi obra.